Cómo cuidar una piel grasa
La piel grasa es aquella que debido a un excesiva producción sebáceas presenta un apariencia aceitosa, con poros dilatados y un permanente brillos a los lados de la nariz frente y mentón. La misma exige un cuidado particular para evitar la aparición de acné, puntos negros y otros problemas dermatológicos.
Las principales causas que influyen en la aparición de este tipo de piel son: hormonales, la edad y hereditarios. Los factores pueden variar para los que presentan este tipo de piel como la herencia que son muy difíciles de modificar pero en otros puede ser transitorios o deberse a hábitos que pueden modificarse.
Los productos para piel grasa, permiten balancear las secreciones y absorber las mismas, permitiendo lucir un rostro sano y que el maquillaje dure por mas tiempo.
Consejos para cuidar una piel grasa
- Lavar la cara dos o tres veces al día, utilizando productos suaves y espumosos. Son muy adecuados aquellos que contienen arcilla, ya que absorben la grasa y regulan la producción de sebo.
- Aplicar cremas reparadoras de día o de noche especiales para pieles grasas. Poco a poco producen un efecto seco e hidratante a la vez que la dejan más lisa y eliminan las espinillas, granos y otras impurezas.
- Exfoliar el rostro dos veces por semana y utilizar una mascarilla purificante, al menos una vez, ya que limpiará en profundidad la piel y la dejará fresca al instante.
- Utilizar maquillajes livianos, sin aceite, una buena opción son los polvos compactos mate.
- El desmaquillante debe ser para piel grasa y se retira con abundante agua.
- Dormir siempre con el cabello recogido.
- Cambiar la funda de la almohada dos veces por semana, para que la grasa del rostro que queda en las fundas no ensucien los poros y corran riesgo de infección.
- El sol puede acelerar la producción de grasa, por lo que no se debe broncear la piel sin la protección adecuada.
- Beber mucha agua.
- Evitar el consumo de embutidos, chocolate, quesos fermentados, condimentos fuertes, alcohol, y dulces, para evitar así el aumento de grasa en la piel.