¿Qué es la energía?
La palabra energía, viene del griego energeia, que significa activo o trabajo interno. La energía es la capacidad que tiene un cuerpo para realizar una acción o trabajo. También se define como la capacidad de un objeto para provocar un cambio.
El concepto de energía se comenzó a desarrollar cuando los científicos estudiaban las causas del movimiento de los objetos. El primer investigador en usar la palabra energía, fue Thomas Young, un físico inglés, quien en el siglo XIX, la definió como la capacidad de hacer trabajo (cantidad de fuerza aplicada sobre un objeto, multiplicada por la distancia que el objeto recorre en la dirección de la fuerza). La primera forma de energía definida por Young, fue la energía cinética (energía asociada a los cuerpos que se encuentran en movimiento)
Todo lo que nos rodea, bien sea en estado líquido, gaseoso o sólido, inclusive los seres vivos, están formados por diminutos elementos llamados átomos. Estos átomos se componen de protones, neutrones y electrones. Los protones y los neutrones están en el núcleo del átomo y los electrones giran alrededor de ellos. Los protones poseen carga eléctrica positiva (+); los neutrones no tienen carga eléctrica, mientras que los electrones tienen carga eléctrica negativa (-). Normalmente, un átomo tiene el mismo número de protones que electrones, de manera que las cargas eléctricas se compensan.
La energía proviene de distintas fuentes, se manifiesta en diferentes formas y puede transformarse y almacenarse.
Fuentes de energía
Existen tres grandes grupos de fuentes de energía:
- Energías renovables: como su nombre lo indica, se renuevan por sí mismas, sin intervención. Provienen del Sol, del viento, de la biomasa y de las mareas. Su uso contamina poco. Juegan un papel cada vez más esencial en la producción de energía. El reto es cómo hacer para aprovecharlas al máximo.
- Combustibles fósiles: Se llaman así, porque se formaron a partir de restos de plantas y animales que poblaron nuestro planeta hace millones de años y quedaron enterrados bajo capas de rocas y tierra.
Durante millones de años, el calor y la presión, los transformaron en combustibles como carbón, petróleo y gas, que al arder, liberan calor.
Se extraen del subsuelo. Sus reservas son limitadas; se necesitan millones de años para que se puedan renovar. Se transforman en energía por combustión, pero al hacerlo se pierden para siempre, contaminan el ambiente y potencian el efecto invernadero y la lluvia ácida.
- Energía nuclear: también llamada energía atómica, es la que está almacenada dentro del núcleo de los átomos, debido a la acción de la fuerza nuclear. La fusión nuclear consiste en unir núcleos pequeños para formar más grandes. Este fenómeno es el que sucede en el Sol: por fusión nuclear átomos de hidrógen forman átomos de helio, lo cual produce calor, luz y otras radiaciones.
La energía nuclear puede ser transformada en energía térmica, eléctrica o mecánica. Tiene importantes aplicaciones en el campo de la medicina, agricultura, geología y antropología, entre otros.
Esta energía manejada de forma inapropiada ocasiona un gran peligro para la humanidad. Las bombas atómicas podrían extinguir toda la existencia humana si se emplea en una guerra.